Te voy a poner un ejemplo: pregúntale a cualquiera si quiere comprarte un Maserati GranTurismo S. Como seguramente será un vehículo que no conozca, dile que mide 4.881 mm de largo, 1.915 mm de ancho y 1.353 mm de alto, lo que es buen dato para saber lo que ocupa al aparcarlo. O mejor todavía, dile que consume una media de 16,2 litros a los 100 quilómetros. ¿Qué tal crees que iría la cosa? ¿Cómo entonces marcha?, te vas a estar preguntando. La respuesta está en el nivel de privacidad. Se ha demostrado que cada nivel de privacidad lleva asociado un nivel de comunicación. Entre dos personas que no tienen ningún tipo de privacidad la dialogo es muy superficial. Al contrario, entre quienes tienen un nivel de privacidad muy esforzado la dialogo se torna demasiado profunda, ellos hablan de sus sentimientos, de su vida en pareja, de aspectos que difícilmente discutirían junto alguno más.
Es decir que realmente la conclusión final habría de ser que no tenemos para nada en claro el por el hecho de que de esta institución que se ha ido instalando en nuestra sociedad hasta hacerse intima y esencial de las relaciones familiares, con consecuencias penales graves, salvo las especificas que menté por abuso de autoridad. Un masturbador masculino permite al hombre experimentar nuevas sensaciones tanto en solitario como en compañía. Gracias a este tipo de dispositivos, las personas con pene pueden conseguir clímax más intensos. Cuando hayas escrito una serie de recuerdos, pregúntate: ¿De qué forma me hacen sentir estos recuerdos? ¿Hay temas recurrentes? ¿Algún patrón? ¿Fue divertido hacer un viaje mediante mi historia sexual? ¿Qué me sucedió durante el período en que tuve estas diversas experiencias sexuales? ¿De qué forma difieren estas experiencias del sexo que estoy teniendo ahora? ¿Hay algo que sucedió en los momentos anteriores que puedo recrear en el sexo que tengo ahora?
Hola tengo por nombre Mariana y soy una espectacular latina que acabo de llegar a tu urbe para transformarme en la más dulce y apasionada amazona de tus sueños. Conmigo podrás cabalgar hasta llegar a las fronteras más lejanas del placer. Una vez allí te vas a preguntar cómo habías podido vivir sin conocer tanto gozo y estarás deseando que volvamos a quedar. Soy una mujer sin trampa ni cartón, fogosa y dulce, entregada y linda como sólo pueden serlo las mujeres más preciosas de mi tierra. En mi sonrisa habita la naturalidad de las mujeres que saben gozar de la vida y en mis caderas el vaivén sensual y tropical de quien sabe dar a un hombre aquello que un hombre siempre desea percibir. Ven a procurarlo. Lo guardo para ti.
Convertiré cada instante vivido a mi lado, en verdaderos espacios de placer
En este renglón se ubicó a la masturbación y, lógicamente, al coito anal, al que se solía llamar sodomía (derivada de Sodoma, ciudad mítica que, junto a Gomorra, fue destruida debido a sus desenfrenos sexuales, conforme a la web). Pues bien; seguro que, si te apuraste demasiado, en medio de este cambio de postura ciertas abras sentido como unas pulsaciones pre orgásmicas y apretaste con fuerza los músculos para eludir el final. Si te fijaste, habiendo sentido y superado esas contracciones, después tardas mucho más en llegar al punto de no retorno. Estas parejas son el verdadero testimonio de lealtad, entendimiento, respeto, igualdad, consideración, aceptación, valentía, estabilidad y determinación, todos estos frutos del amor real. Estas parejas son las que nos recuerdan cómo podría ser el matrimonio y que nutre la pequeña llama de ilusión que arde en nuestros corazones de que si, ¡Si se puede! Para ellos, nuestras francas felicitaciones desde lo profundo de nuestras ánimas. Sacar la cabeza del freno. Según explica la educadora y doctora en sexualidad estadounidense Emily Nagoski, en su charla TED Abriendo las puertas a tu genuino bienestar sexual, el mecanismo cerebral que gobierna la contestación sexual es llamado el mecanismo de control dual. Una funciona como acelerador y la otra como freno. El trabajo del acelerador es apreciar todas las claves sexualmente relevantes en el ambiente; todo cuanto ves, hueles, escuchas, degustas o imaginas y que tu cerebro interpreta como sexualmente relevante, mandando la señal de activarse o prenderse. Por otra , el freno está alerta a todas las razones para no hacerlo. Esto último, basándonos en las señales que tu cerebro interpreta como una potencial amenaza. Las contrariedades generalmente no ocurren por poca estimulación al acelerador, sino por el hecho de que hay mucho estímulo en el freno. En un entorno seguro, de calma y tranquilidad, casi cualquier estimulación puede ser interpretada como algo a lo que aproximarse con curiosidad o bien como un eventual estímulo para el acelerador. En entornos estresantes o amenazantes, ocurre exactamente lo opuesto. ¡El contexto es esencial! Por ende, más que apretar el freno o bien el acelerador, lo importante es crear un contexto que tu cerebro interprete como un lugar placentero y seguro. Para muchas personas, ese contexto implica poco agobio, alto cariño y alta confianza. Esto podría darnos luces de por qué para muchos resulta poco placentero el sexo de una noche con un completo ignoto.
En un caso así, el hombre se sienta con las piernas muy abiertas
Asimismo sucede que cuando un varón se siente a gusto con una mujer y consigue formalizar una relación, se relaja y desentiende su conducta, así se acaba la magia, el entusiasmo y ya no hay conquista. ¡Gran error! Ahora aceptar como una elección producir acciones en favor del bienestar de otras personas, requiere compromiso y responsabilidad. Ser responsable significa estar dispuesto y disponible para contestar con acciones específicas a favor de otras personas. Implica aceptar corresponsabilidad por las necesidades de otra persona; pero también hacerse responsable por sí mismo: de sus acciones y de sus actitudes, tal y como lo señala Jack V. Rozell: Nadie puede querer sin ser responsable. Esto significa que la persona debe ser responsable en sus decisiones: de qué forma habla a los demás, cómo piensa, lo que afirma y lo que hace.29 Este sentido de responsabilidad se resume en un sentirse responsable por otros como por sí mismo. Aquí, hombre, tu pareja está tumbada de espaldas, con las piernas abiertas, y tus manos sujetan sus tobillos y hacen que sus piernas se eleven cara tus hombros. Tú estás arriba, penetrándola, y su pelvis está algo elevada. Quizás un cojín bajo sus nalgas favorezca la penetración. Llegar a esta situación desde la del mono puede resultar complicado mas, al mismo tiempo, gozoso. Probad a ver qué tal.
Eso sí: no esperes encontrar entre estos vibradores japoneses ninguno que imite la forma del pene
Hace un par de semanas asistí a una excepcional conferencia dictada por otra increíble y maravillosa mujer, la socióloga Evangelina García Prince quien ejerció un análisis impresionantemente bueno de la participación de la mujer en la transformación de Venezuela, y quien le atinó a mi visión de lo que para mí debería ser el feminismo. Seguir enfrascadas en hacer lo mismo que un hombre y además continuar ejerciendo los roles que típicamente nos han endosado, nos ha hecho cargarnos de trabajo doble, antes solo éramos amas de casa, ahora lo proseguimos siento pero además de esto salimos a trabajar como obreras, ejecutivas o gerentes, pero al final del día llegamos a nuestros hogares y proseguimos limpiando y cocinando. Esta liberación no ha sido justísima para nosotras mismas. Se ha tergiversado la auténtica esencia de lo que es ser mujer, todavía no ejercitamos poder y distamos de tenerlo por el hecho de que nos empeñamos en apreciar hacerlo desde exactamente la misma visión masculina. Y es que absolutamente nadie nos ha enseñado a ejercer el poder desde lo femenino, y hacemos copias baratas del poder masculino, entonces si tengo o deseo poder, debo ser más macha que Conan el Bárbaro y me muestro violenta y violenta con los hombres y aún considerablemente más con las otras mujeres. Escondo entre maquillaje y tacón mis fealdades e inseguridades, y además de esto oculto en mi cartera mi feminidad que queda ensombrecida por la visión de lo que considero, un falso feminismo que desnaturaliza mi condición de mujer. Y como afirmó Madonna en su alegato como Mujer del Año; si esto es el feminismo, entonces soy una mala feminista.